En un pueblo eminentemente religioso de su origen, no entiendo porque sucedían tantos hechos paranormales o fantasmagóricos, muchas veces diabólicos, en nuestro pueblo y por las zonas rurales o campos. así como otras manifestaciones misteriosas sucedían en varias casas del poblado, donde se escuchaban romperse las losas, platos, vasos, vitrina de cristales, mecedoras se movían como si alguien estuviera sentada en ella y cuando iban a ver, todo estaba intacto.
En la comunidad de los Montones, había un bohío que nadie podía pasar por el frente porque le tiraban piedras y no se sabía de donde salía las piedras.
También el Arroyo Hondo en el saltadero, muchos llegaron ver Indios lavando en batea, que hacia actividades propia de ellos y cuando alcanzaban a ver las personas se tiraban al charco, donde desaparecía y decía que debajo de las rocas habían cavernas profundas.
No sé si es porque era muy joven pero yo presencie parte de un relato que siempre ocurría en nuestro pueblo, sobre un sonido aterrador de un caballo debocado arrastrando una cadena por el medio de las calles, recuerdo que era grimoso escuchar y no ver lo que sucedía, siempre salía un hombre borracho arrastrando un colín o machete sobre el pavimento diciendo: que viva el diablo coño y el sonido no volvía a ocurrir.
Cuando se escenifico “La Pasión y Muerte de Jesucristo” la primera vez, tenía que interpretar el papel del soldado que la da vinagre a Jesús, conjuntamente con Javier Ramírez y teníamos que buscar un lugar que estuviera cerca de la escena para vestirnos, cuando llegamos a una casona negra que había en la avenida, escuchamos varios niños correteando y jugando con mucha algarabía, pero que cuando nos asomamos a la ventana no había nadie en el lugar, esto se repitió varias veces cada vez que no alejamos o nos acercamos, en una yo subí los escalones muy lentamente mientras escuchaba los niños jugando y me asome a la venta rápidamente y sorpresa no había nadie en la sala un silencio total. la casa tenía tiempo que nadie la habitaba.
En cuanto a las brujas no sé si volaban pero un día en Paralimón, me encontraba de visita en una casa cuando de pronto todos salieron despavorido por el sonido aterrador de unas carcajadas burlona que pasaba sobre la casa y que se reaparecía por los árboles de alrededor, todo ellos decía es un brujas es una brujas, yo no la vi pero si escuche sus horribles carcajadas.
En otra ocasión se regó por todo el pueblo que El Surdo Goris, Belanchito y otros hombre más, encontraron en la mata de caoba una bruja que la habían tumbado estaba toda cortada y la llevaron al hospital viejo Hoy Oficinas del gobierno la bruja , yo fui y la vi parecía a la veíamos en las películas y en los muñequitos una vieja con las narices largas y con el pelo largo y alborotada, luego después de curarla vinieron la policía le pusieron las esposas y la trajeron al cuartel municipal donde le dijeron suéltenla que ya esa bruja esta tumbada, esa no hace nada ya no tiene poderes y así fue, salió caminando por la avenida con una turba de niños y jóvenes le voceaban y no se supo más de ella.
Oí hablar mucho sobre las botijas, un primo mío en Bostoncillo trabaja en el conuco, cuando de repente chocó con un objeto duro cuando desyerbaba con su asa, era una vasija de barro que contenía muchas monedas que parecía oro, inmediatamente la desenterró y cuando la tenía cargada, vino un ventarrón que lo puso oscuro y cayo de rodilla al suelo y cuando vino a darse cuenta ya no tenía el botín, se lo habían quitado y no supo cómo.
En el pueblo se comentó que Alcides Santana y Manuel Pérez (Cacata o Kaky) habían sacado una botija debajo del cafetal del patio de Chichilo Torres, nosotros no enteramos y nos dirigimos al lugar donde fue encontrada, para confirmar lo que se decía y vimos un cráneo, velas, huesos, un hueco sin tierra y un palito, porque según no se saca con pico, ni pala, Kaki contaba que cada vez que escarbaba sonaba el quejido del muerto pujando y el con miedo repetía.
También fue descubierta una botija en la finca de Don Edilio, hoy Barrio Lindo en el tronco de una mata de mango, antes de que la persona falleciera y fue encontrada por unos adolescentes, los cuales repartieron dinero a muchos en la población y pagaban la entrada a muchos niños el matinée en el Teatro Olimpo, le compraban golosinas, hasta bicicletas y motocicletas llegaron a comprar, luego se descubrió lo acontecido., tremendo lío se armó ahí.
No sé si eran maldiciones o brujería que le hacía a muchas personas, que supuestamente la hechizaban y le hacía ver cosas que solo ella veía, pude presenciar en dos o tres ocasiones que personas a mi lado que gritaban, señalaban y luego enmudecía y caían desmayado porque alguien vestido de blanco, se le aparecía o le seguía, porque supuestamente se le montaba un muerto, se decía que en nuestro pueblo habían personas que se dedicaba a estas prácticas y muchas se le vio en hora tarde de la noche buscado osamenta en el cementerio.
La Mansión de Trujillo o sus alrededores fue escenario de muchas manifestaciones fantasmagóricas o espeluznantes, así como castigo o corrección a muchos jóvenes que se portaban mal con sus padres, pues siempre le decía te vas a salir un muerto, el diablo, fulano o perencejo para que se portara bien, en una ocasión Manuel Marcelino EPD, salió sin permiso de sus padre y se extravió, luego lo encontraron todos raídos en el cuerpo entero y la cara, no se supo quién lo hizo, todos se imaginaron que fue el mismo diablo que le salió.
Había un muñeco de trapo, que los tigres siempre utilizaban para asustar o hacerle broma a muchas gentes, en una ocasión se lo colocaron Alén Rodríguez en el callejón de La Duarte por El Guayabal, después que el salía de trabajar en el Cine Olimpo, tenía que pasar por ese callejón bien oscuro, al momento de pasar por allí, le dejaron caer desde una mata al famoso muñeco ahorcado, cuando Alén vio esto cayó de rodillas con todo paletera que traía al hombro y dijo: hay mi papacito, ahí mi papacito no me lleve todavía.
También se lo pusieron a Josélo “La Carabela” como le decía, en el callejón de Villa Cayuco o la calle Presidente Vásquez, muy cerca a La Peñita, él no era muy letrado y le pidió a Javier Salcé que le pusiera atrás en su camiseta un letreo que dijera “Yo amo a Miky” y este le puso Yo soy un burro y se pasó toda la tarde modelado su camiseta a su pretendiente y todo se reían menos él, También fue donde el colmado de Manuel López García y le preguntó a como el compraba los huacales de botellas vacía de refrescos, a lo que le contestaron a 95 centavos, este fue a su casa que está bien retirada del lugar y el colmadero decidió pagarles algo más y le dijo: _Josélo por ir tan lejos yo te voy a pagar 1 peso por el Huáscar, a lo que este le respondió, _Mire coño, no señor usted me dijo 95 cheles, y ahora usted me dice que son 1 peso, mejor me lo llevo otra vez.
A Beato un trabajador del colmado de Augusto Bisonó, también le pusieron el famoso muñeco, pero esta vez lo colocaron como si estuviera abriendo la puerta, cuando este se percató de lo que estaba sucediendo, empezó a sonar el colín o machete en la calle y hacer voces diciendo
_¡Ey, Ey, Quien es usted?, como no respondía, seguía sacando chispa con el machete sobre la calle y le decía al muñeco: _pero es que usted no entiende, mire quítese de ahí, sino le vuelo el pescuezo, se iba a acercando y como no le escuchaba, se lanzo contra el y le cortó la cabeza al muñeco que cayó rodando sobre el pavimento y entonces Beato empezó a llorar diciendo: ¡ ahí se lo dije, ¡ ahí se lo dije.
No sé qué fue lo que paso, pero todos estos mitos o leyendas se fueron desapareciendo y convirtiendo en bromas que a medida que la ciencia y la tecnología fueron avanzando y al pueblo fueron llegando los televisores, la mayoría de estos relatos y cuentos salían de la mente de todos los lugareños. Entonces surgieron, más sitio de diversión, bares, discotecas y cine.